En España, pensar en el final de la vida es una conversación que a menudo se pospone. Sin embargo, contar con un seguro de decesos se ha convertido en una decisión cada vez más común y considerada, ofreciendo una serie de ventajas que van más allá de la simple cobertura económica. Este tipo de póliza proporciona tranquilidad y apoyo en un momento delicado, aliviando la carga emocional y financiera de los seres queridos.
Una de las principales ventajas es la gestión integral de los trámites. En el momento del fallecimiento, los familiares deben enfrentarse a una serie de gestiones burocráticas complejas y dolorosas: certificados, permisos, contratación de servicios funerarios, traslados, etc. El seguro de decesos se encarga de coordinar y llevar a cabo todos estos trámites, desde el primer momento hasta la sepultura o incineración, liberando a la familia de esta pesada carga administrativa.
Además, el seguro de decesos ofrece una cobertura económica completa de los gastos del sepelio. Los costes asociados a un funeral pueden ser significativos, incluyendo el féretro, el alquiler del tanatorio, las flores, las tasas del cementerio o crematorio, y otros servicios. Contar con un seguro garantiza que estos gastos estén cubiertos, evitando un desembolso económico inesperado y considerable para la familia en un momento ya de por sí difícil.
Otra ventaja importante es la libre elección de los servicios funerarios. Aunque la póliza cubra los gastos, muchas aseguradoras ofrecen la posibilidad de elegir entre diferentes opciones de ataúd, flores, lápidas, e incluso la ubicación del entierro o el tipo de ceremonia. Esto permite que la despedida se realice de acuerdo con los deseos del fallecido y las preferencias de la familia.
Más allá de la cobertura básica, muchos seguros de decesos incluyen servicios adicionales de gran valor. Estos pueden comprender apoyo psicológico para los familiares, asistencia legal para la gestión de herencias, traslados nacionales e internacionales, e incluso servicios para mascotas. Estos extras pueden marcar una diferencia significativa en el apoyo que recibe la familia durante y después del fallecimiento.
En un país como España, donde la tradición de velatorios y entierros dignos está muy arraigada, el seguro de decesos se percibe como una forma de garantizar una despedida respetuosa y acorde a las costumbres. Permite honrar la memoria del ser querido sin la preocupación añadida de los costes económicos o la complejidad de los trámites.
En definitiva, contratar un seguro de decesos en España es una decisión inteligente que proporciona seguridad, tranquilidad y apoyo a las familias en un momento de gran vulnerabilidad. Al encargarse de los aspectos prácticos y económicos del fallecimiento, permite que los seres queridos puedan centrarse en lo más importante: el duelo y el recuerdo de su ser querido.